
El precio de los combustibles en Argentina se determina a partir de diversos factores, entre los que destacan el valor internacional del petróleo, la carga impositiva y la variación en el tipo de cambio. Estos elementos cobran especial relevancia en el contexto actual, dado que la liberación del cepo cambiario podría generar movimientos significativos en el mercado.
La evolución de estas variables será determinante para definir los próximos ajustes en los precios de los combustibles. Por ejemplo, una suba en el valor del dólar podría neutralizar una baja en el precio internacional del crudo, limitando así la posibilidad de una reducción en los surtidores.
Otro factor clave es la carga impositiva. Los impuestos representan más del 40% del precio final que paga el consumidor, por lo que cualquier incremento autorizado por el Gobierno se traslada directamente al valor del combustible.
Por su parte, la inflación no incide de manera directa en los precios de la nafta y el gasoil. Así lo explicó el especialista Marín, quien aclaró que “los precios no están atados a la inflación”, lo que significa que una aceleración en el índice general de precios no implica necesariamente un aumento en los combustibles.
El último ajuste realizado por YPF fue de un 1,7% en promedio a nivel nacional a comienzos de abril, cifra apenas inferior al 1,9% registrado en marzo. Estos incrementos estuvieron vinculados principalmente a la suba del Impuesto a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, así como a ajustes en los costos internos.
Actualmente, el precio del litro de nafta en Argentina ronda los US$1,1, posicionando al país como el tercero más caro de Sudamérica, detrás de Uruguay (US$1,8) y Chile (US$1,2), según datos internacionales.